He dado charlas sobre manejo de cuencas, agua y suelos para niños de escuelas primarias y secundarias. También Jornadas para Docentes de Escuelas Primarias. Luego en Universidades. Y últimamente para alumnos de escuelas secundarias de Fundación Pescar.
He recorrido casi todo el país.
Encontré en muchos lados que sabían de la erosión. Y se sentían culpables, pero no siempre tenían idea cómo prevenir o recuperar suelos o ambientes.
Lo mismo está ocurriendo con niños que no quieren llegar a adultos, pues creen que el mundo desaparecerá, por la contaminación y las catástrofes.
Pero, la solución está en generar una propuesta proactiva.
Ecología urbana
En las casas, siempre veo que se usan detergentes concentrados. Daña las manos y contamina las aguas, aún los biodegradables, y eso afecta tanto a los pozos ciegos, como a los peces de ríos y arroyos.
¿Podemos diluirlo, una parte de detergente en cinco de agua? ¿Podemos poner todos los cubiertos en una olla en la noche y enjuagarlos a la mañana?
Hay luces encendidas en toda la casa. En los ascensores son pocos los edificios que tienen luces de bajo consumo y menos aún los que tienen leds.
Pero en casi todos, cuando se trata de iluminar el pasillo, se encienden todo desde planta baja hasta la azotea. Con un sensor en cada piso, se podría hacerlo a menor costo.
Me consta que en algunos consorcios.., se redujo el consumo de gas en un 40 %. Pero se pasó de tener agua caliente sólo 8 horas a 24. ¿Qué pasó? Se cambió a llama plana y se reguló el tiraje. La explicación por la que se logró el apoyo del consorcio fue esta: Si uno pasa la mano por encima de una vela encendida en forma lenta se quema, pero si lo hace rápido no. Eso pasa en el caso de las calderas o en los termotanques.
Este gas en exceso, calentaba la ciudad, sin ningún beneficio. Esto contribuye al calentamiento urbano.
Conclusiones
En vez de una Ecología como un cuco, acerquemos a los niños a la Naturaleza. ¿O en vez de condenar el desmonte, plantar árboles?
Visitemos los parques en las ciudades o reservas naturales o huertas o campos ecológicos. O al costado o costanera de un río o arroyo…O algo más al alcance nuestro. Sembrar semillas de porotos o habas. O lograr un malvón a partir de un gajo. O tal vez en un jardín, plantar una estaca de sauce…
También se puede ensayar en dos macetas con plantas iguales, en una se mantiene el suelo circundante siempre desnudo y en la otra se le agrega, una capa fina de yerba mate usada. Observen la diferencia, con el transcurrir del tiempo. ¿Qué pasó? ¿Hicieron la prueba?
Seguro van a ver que al tiempo, el suelo desnudo se plancha y llega a rajarse. En cambio, el suelo con yerba usada, se va haciendo esponjoso.
Un comentario: No es recomendable echarle té o café.
Asesor Carreras de Agronomía y Tecnología de los Alimentos y Profesor Titular de Ecología, Universidad del Salvador, Pilar, Provincia de Buenos Aires.